ENFERMEDADES MENTALES 

DEFINICIÓN (¿QUÉ SON?)

Las enfermedades mentales son las que afectan al cerebro y al sistema nervioso, de manera que provocan alteraciones en la conducta y consciencia de las personas que las padecen. También se conocen como psicopatologías o trastornos mentales.

A lo largo del siglo XX la medicina avanzó a pasos de gigante en el ámbito del diagnóstico y tratamiento de las enfermedades mentales. Anteriormente, aquellas personas que padecían algún tipo de trastorno mental, eran tratadas simplemente de “locas” y encerradas en manicomios (auténticas cárceles) donde eran maltratadas y torturadas (supuestamente para curarlas) hasta el fin de sus días.

Hoy en día los diagnósticos han mejorado, las enfermedades se conocen mejor y existen tratamientos realmente efectivos. Muchas personas que padecen los mismos trastornos por los en la antigüedad se las hubiera torturado y encerrado ahora pueden disfrutar de una vida libre y perfectamente normal gracias a los avances en la medicina.

La rama de la medicina que estudia las enfermedades mentales es la psiquiatría, aunque trabaja en equipo con la psicología y la neurología.

Clásicamente se han dividido las enfermedades mentales en dos grandes grupos: Los trastornos neuróticos y los trastornos psicóticos . Los neuróticos son los afectan a la capacidad de razonar y de relacionarse con la sociedad. Los trastornos psicóticos son los que provocan una pérdida de la capacidad de percepción de la realidad. No son grupos excluyentes, es decir, se pueden dar casos en que una persona sufra un trastorno que implique alteraciones de ambos tipos (comorbidad). A los dos grupos mencionados, se ha añadido de manera relativamente reciente otro gran grupo, los trastornos de personalidad: Son aquellos trastornos que alteran la emotividad de la persona, su funcionamiento en la sociedad y su control de los impulsos.
//ad//
EJEMPLOS

Ejemplo 1: Trastorno antisocial de la personalidad (TPA) : Es un trastorno disocial de la personalidad. Las personas que lo sufren no pueden adaptarse a las normas y comportamiento establecidos en la sociedad y frecuentemente se aislan. Se suele manifestar a partir de la adolescencia.

Ejemplo 2: Esquizofrenia. Es una enfermedad crónica y grave. Pertenece al grupo de los trastornos psicóticos, las personas afectadas de esquizofrenia sufren alteraciones en la percepción de la realidad y en las funciones ejecutivas. Se sufren creencias delirantes, paranoias y alucinaciones (mayormente auditivas). Se calcula que padece esquizofrenia un 1% de la población mundial.

Ejemplo 3: Trastorno depresivo mayor (depresión clínica). No es un trastorno crónico, aunque en ocasiones puede ser recurrente. Se caracteriza por un estado de ánimo muy bajo, muy poca autoestima y la pérdida de la capacidad de experimentar placer. Las personas que lo padecen suelen superarlo con un tratamiento a base de antidepresivos y terapia cognitiva.

Más ejemplos:
Trastorno bipolar, autismo, trastorno paranoide de la personalidad, trastorno obsesivo-compulsivo de la personalidad, trastorno esquizoafectivo, trastorno delirante, agorafobia.